Tradición vs. bienestar: repensando los 108 Saludos al Sol

¿Alguna vez te preguntaste por qué hacer 108 Saludos al Sol? ¿Por qué exactamente 108?

¿Por qué repetir una y otra vez una secuencia hasta llegar a ese número? ¿Qué buscamos con ello?

Me gusta repensar y analizar aquellas tradiciones que heredamos y adoptamos. En ocasiones, dichas prácticas y ritos cobran sentido en la actualidad, se resignifican y reestructuran, se tiñen de la realidad y actualidad que las acoge. Pero hay casos en los que se automatizan y cristalizan, no permitiéndonos cuestionar qué efectos tienen en nosotros.

Hoy quiero que repensemos juntos la tradición de los 108 Saludos al Sol, y os compartiré mis ideas y reflexiones.

Perspectiva tradicional yóguica

Origen y significado espiritual

Surya Namaskar, que en sánscrito significa “saludo al Sol” (surya = sol, namaskāra = saludo), se remonta a antiguas prácticas védicas de alabanza a Surya como fuente de luz y vida. En el siglo XVII ya existen referencias a ejercicios en honor al Sol en textos como el Aditya Hridayam del Ramayana, aunque la secuencia moderna fue popularizada en 1928 por Bhawanrao Shriniwasrao Pant Pratinidhi, Rajá de Aundh, para promover salud física y espiritual. Cada uno de los doce pasos se asocia en algunas escuelas con un bija‑mantra y con un nombre de Surya (por ejemplo, “Om Ravaye Namah” alzando los brazos) para sincronizar respiración y sonido, convirtiendo el movimiento en una meditación activa.

¿Por qué 108?

Hacer 108 saludos al sol es una práctica simbólica y ritual que tiene raíces en la tradición yóguica y en el hinduismo. El número 108 es considerado sagrado y lleno de significado espiritual en muchas culturas de la India. Estas son algunas de las razones más comunes por las que se elige ese número:

1. Significado espiritual del 108

• Numerología védica: El 1 representa lo divino o la conciencia suprema, el 0 simboliza el vacío o la plenitud espiritual, y el 8 representa el infinito o la eternidad.

• Mantras: Muchos malas (rosarios yóguicos) tienen 108 cuentas, y los mantras suelen repetirse 108 veces para completar un ciclo.

• Cosmología: En la tradición hindú, hay 108 nombres para muchas deidades, como Shiva y Vishnu.

  
  

2. Astronomía y matemática

• Distancia Tierra-Sol: La distancia entre la Tierra y el Sol es aproximadamente 108 veces el diámetro del Sol (y lo mismo con la Luna).

• 12 zodiacos x 9 planetas (en astrología védica): 12 × 9 = 108.

  
  

3. Ritual de renovación

• Se suele practicar en momentos de transición como el cambio de estación (equinoccios y solsticios), el inicio de un nuevo ciclo, o como una forma de limpiar el cuerpo y la mente.

• También es una forma de devoción y entrega, donde la repetición física genera una "meditación en movimiento".
  

4. Desafío físico y mental

• Repetir 108 saludos al sol exige concentración, resistencia y presencia, y puede convertirse en una práctica profunda e intensa a nivel físico y mental.

Una perspectiva contemporánea

La simbología y ritualidad de los 108 Surya Namaskar es clara. Pero no puedo evitar preguntarme si esta práctica es sana y recomendable para la mente/cuerpo occidental moderna de la persona promedio.

Analicemos primero qué efectos tiene en el cuerpo en caso de que se practique correctamente y de forma adaptada y conciente. Cabe aclarar que estos efectos aplican a la práctica del Surya Namaskar de forma moderada, y no a las 108 repeticiones.

Enfoque biomecánico

Activación muscular y salud postural

Un estudio con electromiografía de superficie en practicantes avanzados reveló que Surya Namaskar produce actividad alta en el erector espinal con picos durante Uttanasana y Bhujangasana, y activación moderada‑alta en glúteo mayor, vasto lateral y trapecio inferior, lo que refuerza la musculatura estabilizadora del tronco y previene molestias lumbares. Asimismo, la alternancia de flexión y extensión de la columna vertebral promueve la movilidad intervertebral y estimula la circulación sanguínea en los discos intervertebrales.

Cinética y cinemática de la secuencia

Análisis con sensores inerciales muestran transiciones suaves de inclinación de tronco y cambios de apoyo en extremidades, optimizando la distribución de cargas articulares en hombros, caderas y rodillas durante las posturas de “plancha” y “perro boca abajo”. La práctica repetida mejora la propriocepción y la coordinación intermuscular, reduciendo picos de fuerza vertical que podrían sobrecargar las articulaciones si se realizan sin control de posición.

Efectos a nivel mental de la práctica de Surya Namaskar

Un estudio realizado en 2023 con adolescentes escolares en India encontró que la práctica regular del Surya Namaskar durante dos semanas mejoró significativamente la salud mental, el autocontrol y la atención plena de los participantes. Se observaron mejoras en la conciencia y la regulación emocional, lo que sugiere que esta práctica puede ser beneficiosa para la salud mental.

Además, una revisión de la literatura destaca que el Surya Namaskar tiene efectos positivos en aspectos físicos, psicológicos y fisiológicos del cuerpo, enfatizando su utilidad como una práctica completa para el bienestar general .

Enfoque Fisiológico

La práctica moderada de Surya Namaskar —definida como realizar entre 3 y 12 rondas a ritmo controlado, sin transiciones explosivas ni posturas avanzadas— aporta múltiples beneficios fisiológicos. Cardiovascularmente, mejora la capacidad cardiorrespiratoria (3–6 METs), reduce la frecuencia cardíaca en reposo y optimiza el perfil lipídico. En el sistema respiratorio, potencia la función pulmonar y fortalece la musculatura inspiratoria y espiratoria. A nivel musculoesquelético, aumenta la fuerza y resistencia de tronco, extremidades y core, así como la movilidad articular en caderas, hombros y columna. Metabólicamente, eleva el gasto energético y promueve la regulación glucémica y lipídica. Además, contribuye al equilibrio autonómico, aumentando el tono parasimpático y reduciendo marcadores de estrés como el cortisol.

Críticas a la Práctica de los 108 Saludos al Sol

Habiendo entendido qué es el Surya Namaskar, el por qué de la tradición de las 108 repeticiones, y cuáles son sus efectos a nivel físico y mental cuando se practica de forma conciente, adaptada y moderada, abordemos la problemática:

¿Qué nos genera a nivel físico, mental/emocional y fisiológico las 108 repetienciones?

Riesgos y consecuencias físicas

• Riesgo de lesiones por sobreuso: La naturaleza repetitiva de 108 saludos al sol aumenta la probabilidad de lesiones en muñecas, hombros y zona lumbar. Se han reportado casos de “yoga butt”, un síndrome de sobreuso en los glúteos causado por la frecuencia de las flexiones y extensiones de cadera; y lesiones de hombro relacionadas con la ejecución inadecuada de Chaturanga, que pueden provocar tendinopatías y bursitis.

  
  

• Sobrecarga de articulaciones: Cada repetición implica carga en hombros y codos durante la transición de “plancha” a “perro boca abajo”; multiplicar esto por 108 sin descansos adecuados puede generar microtraumatismos en las superficies articulares.
  

• Falta de preparación física: Iniciar directamente con 108 saludos sin un acondicionamiento previo aumenta el riesgo de lesión. Expertos recomiendan progresar gradualmente, evaluando la respuesta del cuerpo y omitiendo posturas cuando sea necesario. Muchas de las personas que abordan al práctica lo hacen con poca experiencia y/o conocimiento de la biomecánica del movimiento y de la condición de su propio cuerpo, aumentando las probabilidades de lesiones y desgaste del sistema musculoesquelético.
  

• Beneficios limitados a la dosis: Estudios sobre Surya Namaskar señalan que la práctica regular mejora la capacidad cardiorrespiratoria, pero esos beneficios se documentan en sesiones de intensidad y duración moderadas (por ejemplo, 12–24 repeticiones) y no en maratones de 108 ciclos.
  

Impacto mental y emocional

• Agotamiento cognitivo y emocional: Aunque la repetición rítmica puede inducir un estado meditativo, tras 20–30 ciclos muchos practicantes reportan fatiga mental y distracción antes de entrar en concentración profunda.
  

• Estrés por “rendimiento”: La presión de completar 108 saludos al sol, especialmente en eventos colectivos, puede generar ansiedad y frustración si no se alcanza el objetivo; esto contrasta con el espíritu de aceptación y desapego del yoga tradicional.
  

• Ritual vs. disfrute: Para algunos yoguis, la carga devocional y el componente ritualístico pueden sentirse más como una obligación que como una práctica para mejorar su salud, afectando negativamente la calidad de la experiencia y el bienestar psicoemocional.

  
  

Consideraciones fisiológicas

• Desequilibrio autonómico: Realizar altos volúmenes de saludos puede alterar el equilibrio simpático-parasimpático, reduciendo la variabilidad de la frecuencia cardíaca y dificultando la recuperación tras la sesión.
  

• Elevación de cortisol: A ritmos rápidos o con repeticiones excesivas, puede aumentar la actividad simpática y los niveles de cortisol, lo cual puede derivar en agotamiento autonómico y efectos adversos sobre la regulación del estrés.

Reflexión final

"Dosis, calidad y contexto": tres palabras de un maestro que resumen con precisión el espíritu de esta reflexión. Los 108 saludos al sol son un poderoso acto de disciplina y devoción, pero no constituyen un indicador absoluto de beneficios mayores. Físicamente, sin una progresión prudente ni adaptaciones, pueden derivar en lesiones de sobreuso; mentalmente, pueden desgastar la motivación y la concentración; emocionalmente pueden teñirnos de competitividad, apego a un resultado y consecuente frustración; a nivel fisiológico pueden generarnos desequilibrios en el sistema nervioso autónomo y afectar negativamente nuestra variabilidad de frecuencia cardíaca. Por ello, es fundamental personalizar la intensidad, incluir descansos estratégicos y priorizar la escucha corporal, armonizando la tradición yóguica con la evidencia biomecánica y psicológica para que esta práctica sea verdaderamente transformadora.

Las tradiciones, ritos y símbolos están en constante diálogo con nuestra contemporaneidad. Conservemos aquello que nos nutre, y repensemos aquello que ya no se adapta a nuestra realidad. Actualizar no es olvidar, sino crecer. Honremos nuestras tradiciones, habitemos nuestros ritos, llenemos de sentido nuestros símbolos, pero no nos aferremos a prácticas que nos quedan lejanas y que pierden sentido, y aún peor, que pueden hacernos daño. Fuentes utilizadas

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2. Sinha B, Ray US, Pathak A, Selvamurthy W. “Comparison of cardiorespiratory responses between Surya Namaskar and bicycle exercise at similar energy expenditure level.” Indian Journal of Physiology and Pharmacology. 2004. Europe PMC

3. Larson‑Meyer DE. “A systematic review of the energy cost and metabolic intensity of yoga.” Medicine & Science in Sports & Exercise. 2016;48(9):1558–1569. Wikipedia

4. Mody PJ. “Acute effects of Surya Namaskar on the cardiovascular & metabolic system.” Journal of Bodywork and Movement Therapies. 2010;14(1):61–65. ResearchGate

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7. Taneja I, et al. “The science of Surya Namaskar: a literature review.” Journal of Ayurveda and Integrative Medicine. 2022;13(4):101218. ScienceDirect

8. “Sun Salutation.” Wikipedia. Última edición May 2025. Wikipedia

9. PMCID: PMC8814407. “Surya Namaskar: effects on physical, psychological and physiological parameters – a systematic review.” PubMed Central. 2022. PMC

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11. “Surya Namaskar: As an Alternative for Aerobic Fitness.” International Journal of Yoga. 2022;15(2):120–125. Lippincott

12. “Insights on Surya Namaskar from its origin to application towards cardiovascular health.” ScienceDirect. 2021. ScienceDirect